El petróleo intermedio de Texas (WTI) protagonizó este lunes un desplome histórico del 305% y por primera vez desde que hay estadísticas entró en valores negativos, pues el valor del barril estadounidense quedó en -37,63 dólares el barril, con los comerciantes muy preocupados por una caída en la demanda del petróleo debido a la pandemia del coronavirus.
En un mercado saturado, los tenedores de contratos para mayo -que expiran el martes al cierre- deben encontrar compradores para el petróleo físico lo antes que puedan. Pero como las reservas están casi al límite en Estados Unidos, deben erosionar los precios para colocarlos.
El barril de crudo WTI, que se intercambiaba a 60 dólares por unidad a inicios de año, se hundió por completo este lunes. Y más: terminó la jornada en -37,63 dólares.
La caída de la demanda de petróleo como consecuencia de la crisis del coronavirus y las dificultades para almacenar todo el excedente llevaron el barril de Texas a comprarse a un precio de -6 dólares.
De esta forma, los mercados de petróleo estadounidense han experimentado lo que se conoce como «contango», que se produce cuando el precio futuro cotiza a un precio más elevado que el actual.
En tanto, en el mercado de futuros de Londres la cotización del barril de petróleo Brent para entrega en junio, que cayó un 8,90%, hasta 25,58 dólares.
El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, concluyó la jornada en el International Exchange Futures con un descenso de 2,50 dólares respecto a la última negociación, cuando cerró en 28,08 dólares.
«Los futuros del WTI de mayo están experimentando ventas masivas, ya que expiran mañana. Todos los inversores que no quieran entrega física necesitan vender el contrato de mayo antes de su vencimiento. Además, no hay compradores físicos para este contrato ya que las capacidades de almacenamiento en EE.UU. han alcanzado su máximo», explicó el gestor de Vontobel AM, Michel Salden.
FUENTE: CLARÍN